El mundo arrastra viejos problemas, como el hambre o la pobreza. Pero también surgen nuevos desafíos, como el cambio climático. La ONGD Entreculturas trabaja para fomentar el sentimiento de que cada persona, sea como sea y de donde sea, forma parte de un todo: de una ciudadanía global que sólo puede resolver los viejos y nuevos problemas si trabaja unida.

En 2017, la Agencia Extremeña de Cooperación Internacional al Desarrollo (AEXCID) desembolsó 40.000 euros para que Entreculturas llevara a cabo su proyecto Un mundo de encuentros, con el que se busca concienciar a jóvenes a partir de 13 años sobre la ciudadanía global en Extremadura desde un enfoque integral de género, sostenibilidad, interculturalidad y derechos humanos.

Entreculturas enfoca su esfuerzo en los centros educativos, donde actúa para conseguir que los alumnos y profesores tomen conciencia de que, para que la humanidad pueda resolver los retos a los que se enfrenta, se debe colaborar y eliminar de la ecuación cualquier prejuicio contra otras personas, ya sea por sexo, raza, lengua o cultura.

En total, la entidad ha trabajado en 12 localidades extremeñas a través de este proyecto y ha llegado a 10.480 personas. Gran parte de ellas viven en entornos rurales, aunque otras residen en ciudades como Mérida o Badajoz.

El autoconocimiento y la empatía ayuda a que los jóvenes comprendan que el contexto global les afecta

La organización procura que los jóvenes con los que trabaja aprendan a valorar a otras personas, a escucharse entre ellos, a reconocer la importancia de las relaciones, la cooperación y la autoestima. Este punto es importante ya que, para que los jóvenes comprendan que forman parte de un todo y se consideren conectados con sus compañeros, deben conocerse y valorarse primero a sí mismos. De esta forma, resulta más fácil para ellos entender que lo que sucede en otros lugares, lejanos a su realidad del día a día, les afecta.

En las actividades que desarrolla Entreculturas se contempla generar este clima de confianza y conocimiento entre los participantes con un objetivo final: que se vean “afectados por el contexto global, para que puedan conocer otras realidades y romper juicios y prejuicios”.

Bajo esta premisa, se explica y se debate con los alumnos sobre los problemas que afrontan los seres humanos, como el cambio climático y los conflictos. También sobre feminismo y la protección de los derechos humanos. Además, en las aulas se habla sobre las posibles soluciones a los desafíos a los que se enfrenta la humanidad, como las que se esperan alcanzar a través de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas.

Acercar realidades

El eje que vertebra las actuaciones de Entreculturas en los centros educativos en los que trabaja es ampliar el conocimiento de la realidad de los alumnos y profesores para que desarrollen una conciencia crítica. Por otra parte, también aborda la sensibilización de los participantes desde la experiencia directa como aprendizaje integral de valores, vivencias, relaciones y corresponsabilidad.

Un total de 320 centros educativos recibieron acceso a recursos y materiales didácticos para integrar en la práctica educativa la ciudadanía global, además de recibir visitas formativas de Entreculturas y la realización de actividades.

También se propician encuentros con personas de diferentes países para acercar la realidad de la movilidad y el refugio a la población extremeña. Estos testimonios directos fomentan el conocimiento de otras culturas y realidades entre los alumnos.

«Hay una falta de acercamiento a otras realidades por desconocimiento»

Sin embargo, la organización explica que en su labor se enfrenta a visiones sesgadas: «Hay una falta de acercamiento a otras realidades por desconocimiento y por la alta influencia en la población destinataria de los medios de comunicación, que crea estereotipos y prejuicios».

Por ello considera necesario que los docentes, los alumnos y la sociedad civil se impliquen para conocer otras realidades, y combatir así las desigualdades en el mundo. Entreculturas anima a que se financien e impulsen proyectos de Ciudadanía Global que generen una transformación tanto a gran escala como de manera local.

Trabajo conjunto

Ocho centros educativos en los que trabaja Entreculturas participan en la labor conjunta que realiza la entidad con comunidades de América Latina y África, que contempla la consolidación del sentimiento de pertenencia a una ciudadanía global. Esta ONGD destaca que también ofrece voluntariado internacional de larga estancia apostando por la formación relacionada con la educación para la ciudadanía global: «Pocas organizaciones lo ofrecen».

Un mundo de encuentros es un proyecto a largo plazo y da continuidad a planes anteriores que la entidad desarrolla desde el año 2010. En él se realizan encuentros entre distintos agentes de las comunidades educativas como herramienta de intercambio sobre las temáticas de derechos humanos, medio ambiente, cooperación…. Todo como un ejercicio de pertenencia a esa ciudadanía global a la que se aspira.

Entreculturas resalta que la experiencia ha sido positiva: el alumnado y profesorado “crece en conocimiento, motivaciones, conexiones con su vocación; y el proyecto ayuda a desarrollar habilidades, aptitudes y actitudes”. También destaca que se ha conseguido estar “más conectados que nunca con las y los jóvenes de las redes internacionales y acercar los kilómetros de separación real para trabajar por una ciudadanía comprometida en todos los lugares, que pueda contribuir a una misma causa”.